El pasado mes de agosto de 2011, el investigador sueco Peter Lindberg anunciaba un descubrimiento sin igual. La aparición, en el fondo del mar Báltico, de una extraña forma circular de unos 18 metros de diámetro. El hallazgo suscitó todo tipo de especulaciones, ya que la imagen parece revelar un objeto artificial que ha sido arrastrado, aunque este punto todavía está por esclarecer. Ahora, este cazador de tesoros ha anunciado que en primavera volverá al lugar donde detectó el gran círculo para recoger más datos, según informa la CNN.
Si obtiene la financiación suficiente -los gastos pueden ser mareantes-, su deseo es recuperar la misteriosa estructura de las aguas o, al menos, conseguir esclarecer el enigma.
Linberg, famoso por encontrar los restos del Jönköping, un carguero sueco hundido por un submarino durante la primera guerra mundial, realizaba una exploración oceánica cuando el sonar de su embarcación capturó una increíble imagen a más 80 metros bajo la superficie del golfo de Botnia, entre Finlandia y Suecia. Pronto corrió la voz de que el equipo acababa de descubrir un objeto volador no identificado (OVNI), una idea descabellada pero no tan extraña cuando se trata de algo inexplicable y la imaginación vuela.
Fotografía real captada por el equipo de Lindberg
En realidad, la imagen resulta de lo más inquietante, ya que el objeto, de unos 18 metros de diámetro, parece haber sido arrastrado otros 400. Suficiente para que nazca la idea de una nave de origen extraterrestre que se estrelló en el mar y dejó un rastro en el fondo antes de detenerse, como llegaron a especular algunos medios.
El equipo de Lindberg cree que el objeto es demasiado grande para haber caído de un barco o ser parte de un desastre marítimo. «Hemos escuchado un montón de explicaciones diferentes, desde que es una especie de Halcón Milenario hasta que es una puerta a un mundo interior», afirma Lindberg a la CNN, «pero no lo sabremos hasta que hayamos estado allí»
Localización del extraño objeto en el mar Báltico En realidad la imágenes de un sonar de barrido lateral no son lo suficiente fiables como para determinar si se trata de una formación geológica natural o algo completamente diferente. Lindberg planea regresar en primavera al mar Báltico para investigar su hallazgo. Su objetivo es poder esclarecer el misterio y, aunque el objeto no se pueda recuperar -una empresa extremadamente cara y arriesgada que quizás no sirva para nada- explotarlo de alguna manera, por ejemplo, con turistas que quieran verlo de cerca.
Anomalia enel mar Báltico