Leyendas, Enigmas, Misterios, Incognitas, Civilizaciones Perdidas, Lugares Enigmaticos, Sucesos Extraños.
domingo, 27 de enero de 2013
El demonio de Dover
Durante más de veinticinco horas, en abril de 1977, una extraña criatura de otro mundo se dio a conocer en el rico suburbio de Boston, en Dover.
El demonio de Dover apareció por primera vez alas 10,30 horas de la noche del 21 de Abril, cuando tres jóvenes se dirigían en coche hacia el norte de Farm Street. El conductor, Bill Bartlett, creyó que veía algo arrastrándose a lo largo de una pared de piedras a su izquierda. En ese momento, los faros del vehículo iluminaron algo que nunca había imaginado, ni siquiera en sus sueños más delirantes.
La criatura volvió con lentitud la cabeza y miró fijamente la luz, mostrando dos ojos grandes, sin pestañas y brillantes, “como dos canicas de color naranja” y una cara por lo demás sin facciones y sin nariz visible. Tenía la cabeza en forma de sandía y casi del mismo tamaño que el resto del cuerpo, que era delgado y larguirucho. La piel carecía de vello se asemejaba al papel de lija. Aproximadamentede 1,30 metros de estatura, había caminado inseguro a lo largo de la pared, agarrándose a las piedras con sus largos dedos.
La visió dejo sin habla a Bartlett y, unos segundos más tarde, cuando recobró la voz, los focos habían dejado de iluminar al a criatura. Sus dos compañeros, que miraban para otro lado, no la habían visto en ningún momento.
Poco tiempo después de este extraño episodio, John Baxter de quince años, volvía a su casa por Millers High Road después de de despedirse de su amiga a medianoche. Había caminado un kilómetro y medio cuando vio una figura bajita que se acercaba y presumió que era un amigo que vivía en la calle. Baxter le llamó pero no obtuvo respuesta.
Los dos continuaron acercándose hasta que la extraña figura se detuvo. Baxter se detuvo también y preguntó: ¿Quién es?. La noche estaba muy oscura, por lo que solo pudía ver una sombra. Dió un paso al frente y aquella forma salió disparada hacia la izquierda, bajó corriendo a un barranco poco profundo y subió también corriendo por el otro lado.
Baxter, perplejo, siguió al desconocido hasta que llegó al barranco. Miró por encima de éste y, a diez metros de distancia vio algo que tenía el cuerpo parecido al de un mono, una cabeza como una sandía y unos ojos chispeantes. Sus largos dedos se agarraban al tronco de un árbol. Baxter se sintió de pronto inquieto y se alejó del lugar.
La siguiente persona que vio al demonio de Dover fue un amigo de Bill Barlett, Will Taintor, de dieciocho años de edad. Barlett había habldo de aquella criatura a Taintor. Sin embargo, éste se asustó mucho cuando él y su amigo Abby Brabham vieron aquella cosa en Springdale Avenue. Su descripción coincidía con la de Barlett, salvo en los ojos, que éste decía que eran anaranjados y aquellos juraron que eran verdes.
Cuando los investigadores interrogaron a los testigos, se sintieron impresionados por la conformidad entre sus declaraciones. También se impresionaron cuando el jefe de policía, el director del instituto, los profesores y los padres de los jóvenes dijeron que éstos eran veraces y dignos de toda confianza.
Como observó uno de los investigadores, Walter Webb, al terminar su estudio del caso, “ninguno de los cuatro había tomado drogas ni bebido cuando habían visto aquello, por lo que pudimos saber… Ninguno de los personajes de este asunto hizo el menor intento de acudir a los periódicos o a la policía para dar publicidad a sus afirmaciones. Antes al contrario, sus visiones trascendieron gradualmente. En cuanto a la idea de que los testigos fueron víctimas de alguna broma, esto resulta bastante improbable.”
¿Qué eran el demonio de Dover? Algunos han sugerido que era un extraterrestre. Otros dicen que podía ser lo que los indios del este del Cánada llaman Mannegishi. Hombrecitos de cabeza redonda sin nariz, de piernas largas y flacas y manos con seis dedos. Según la leyenda, los Mannegishi viven entre rocas en los rápidos de ríos y torrentes.
La leyenda del Mothman
La leyenda del Mothman es sin duda una de las más enigmáticas, misteriosas y realmente curiosas historias que existen sobre seres sobrenaturales , ya que, el patrón que sigue su aparición, parece estar más cerca del seguido por una leyenda urbana que el que habríamos de esperar para unos sucesos aparentemente reales….El aspecto físico que se le atribuye a esta hipotética criatura, es la de un humanoide de más de 2 m de altura, con grandes alas que se repliegan, cubierto de pelo gris oscuro, con grandes garras en las patas, sin cabeza ni brazos y con dos grandes ojos rojos y luminosos a los que se atribuyen facultades hipnóticas que están situados en el tórax cerca de los hombros.
Todo ocurrió en West Virginia, y se sucedió durante un año. La oleada de avistamiento del “Mothman” comenzaba el 15 de Noviembre de 1966, concretamente en Point Pleasant. Además, durante todo ese año, se sucedieron una serie de extrañas llamadas en las que solo se escuchaba el “ruido que haría un ratón de tamaño gigantesco”. Un ruido posteriormente atribuido al Mothman.
En la noche del 14 al 15 de noviembre, dos matrimonios paseaban en automóvil cerca del sector conocido como “área TNT”, una zona de antiguos depósitos militares de explosivos usados durante la segunda guerra mundial. Ellos habrían observado al lado del camino a una criatura de unos 2 m de altura, con dos alas plegadas a la espalda y que les miraba con dos brillantes ojos de color rojizo. El conductor se habría dirigido hacia la carretera principal y los ocupantes aterrorizados habrían sido seguidos hasta la misma entrada del pueblo. Los supuestos testigos habrían afirmado haber oído un agudo grito proveniente de la criatura; luego cuando habrían relatado lo sucedido a la policía, se habría ordenado una exhaustiva búsqueda en el “área TNT”, sin aparecer nada. El día 16, también en las inmediaciones del antiguo depósito militar, se dice que otro supuesto testigo habría asegurado haber visto al monstruo: “Lo vi entre las sombras, era como si se hubiese estado arrastrando en el piso y lentamente fue poniéndose de pie, de color gris y mucho más alto que un hombre, con dos terribles ojos rojos”. También esta persona le habría atribuído poderes hipnóticos a la mirada de ese par de ojos rojos de la supuesta bestia.
La noticia no tardó en difundirse y rápidamente Point Pleasant se convirtió en el foco de atención de muchos “caza-monstruos”, que armados recorrieron una y otra vez los sitios señalados por los testigos sin encontrar absolutamente ningún indicio.
El 25 de noviembre, en un campo de cultivos, otro supuesto testigo lo habría visto, a las 7,15 de la mañana cuando se dirigía a su trabajo, una figura humana de color grisáceo, elevándose verticalmente desde el suelo y abalanzándose contra el auto. Se dice que la víctima aterrorizada aceleró, pero la bestia lo estuvo siguiendo, dando vueltas sobre el vehículo como si estuviera jugando, durante varios kilómetros.
Igualmente se dice que pilotos pertenecientes a la base militar cercana de Galípolis, el día 4 de diciembre también habrían observaron al monstruo maniobrando y planeando sobre el río, y que pudieron calcular que iba a unos 100 m de altura y a casi 100 km por hora. Posteriormente le habría seguido con sus aviones con la intención de fotografiarle, pero se dice que no pudieron ya que el ser habría desaparecido en uno de sus movimientos cerca de un espeso bosque.
La periodista Mary Hyre comenzó a publicar artículos sobre este extraño personaje en el periódico “The messenger”, y comenzó a indagar para sus publicaciones. En ellas aseguraba haber sido acosada por las visitas de unos hombres vestidos de negro que le aconsejaban dejar de publicar artículos sobre el tema. Esta periodista, además, aseguraba que casi cada noche se desvelaba, víctima de un sueño que se repetía cada madrugada? Veía como el puente de Silver Bridge, que se sitúa a la entrada de Point Pleasant, se derrumbaba, y ella caía y nadaba entre paquetes de regalos. Un sueño que, como veremos más adelante, no andaba muy lejos de la realidad?
John Keel, periodista que había publicado su primera crónica en el New York Times con tan solo 16 años, y que había conseguido pasar una noche entera dentro de la pirámide de Gizeh, contaba con 36 años cuando se sucedieron los hechos, y se hizo cada vez más conocido desde que comenzó a seguir el caso del Mothman y a publicar reportajes en su revista “The fliying sauce review” (literalmente “La revista de los platillos volantes”).
Los avistamientos del Mothman cesaron la noche del 15 de Diciembre de 1967 cuando el puente de Silver Bridge se vino abajo, acabando con la vida de más de 46 personas. El Mothman nunca más volvió a ser visto en el lugar….
Existen numerosas teorías sobre el Mothman; unos dicen que era un ángel que venía a avisar de la catástrofe; otros, que era un demonio que vino a causarla. Algunos aseguraban que era una grulla canadiense (un pájaro muy popular en el lugar), que incluso podía haber mutado por la radiactividad que aún pudiera albergar la zona TNT, aunque todos los testigos aseguraron que lo que vieron no era una grulla.
También se habló de una maldición echada 500 años atrás por el líder de las tribus nativas, un jefe shawnee llamado Hokolesqua, antes de morir víctima de una emboscada….
Documental Monthman
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