domingo, 6 de febrero de 2011

El craneo de Broken Hill

Pero este no sería el único caso registrado. Tal vez uno de los más conocidos fue el denominado Hombre de Broken Hill, en recuerdo del lugar en que fue hallado el cráneo de un homínido (Broken Hill, al norte de Zambia, la antigua Rhodesia).

El hallazgo tuvo lugar en 1921, cuando los trabajadores de una mina de zinc se preparaban para barrenar unos terrenos situados en una colina en Broken Hill (el nombre actual de esa ciudad es Kabwe, de ahí que en la literatura especializada se conozca con uno u otro nombre) y se percataron de la existencia de una galería, que conducía a la entrada de una caverna. La cueva estaba llena de restos humanos dispuestos de tal forma que indujo a los expertos a pensar que se estaba ante un lugar de enterramiento prehistórico.
Sea como fuera, los trabajos de recuperación se hicieron con torpeza y de los restos hallados, sólo nos ha llegado una mínima parte entre las que se encuentra el cráneo humano conocido como Hombre de Broken Hill u Hombre de Rhodesia. En un principio el cráneo fue clasificado dentro de la categoría de Homo Heidelbergensis e, incluso, se dudó que fuera un homínido, debido, sobre todo a su enorme tamaño. Actualmente se cree que el cráneo en cuestión sí perteneció a un homo sapiens si bien se especuló con la posibilidad de que el espécimen encontrado sufriera de acromegalia . Esta fue al menos la teoría mantenida por el Dr. Jack Cuozzo en su obra Buried Alive: The starling about Neandethal man objeto de fuerte controversia entre creacionistas y evolucionistas. Desgraciadamente, entre los restos no se halló la mandíbula inferior que, al parecer, hubiera ayudado en un diagnóstico más certero.
Sin embargo, lo más sorprendente de este cráneo son los dos agujeros que tiene (lo que aparenta ser un orificio de entrada y otro de salida) situados de forma simétrica en el hueso temporal izquierdo. En un principio se especuló con la posibilidad de que se tratase de una trepanación pero dada la antigüedad de los restos (al parecer, hallados en estratos de más de hace millón de años) como, sobre todo, de la forma y aspecto de los agujeros, esta hipótesis acabó descartándose. Simplemente se concluyó que los agujeros en cuestión no tenían explicación lógica alguna.
El Dr. Cuozzo sometió el cráneo de Broken Hill a diversos análisis y pruebas, llegando a la conclusión de que los agujeros no podían deberse a una trepanación.
En primer lugar, la trepanación, una de las prácticas más antiguas practicada por el hombre tanto por cuestiones médicas como religiosas, no explicaría la presencia de un segundo agujero, mucho más grande que el primero, justo debajo del primero, en el hueso occipital.
En segundo lugar, el primer agujero es más grande en su parte interior que en su parte exterior. Es decir, tiene lo que podríamos denominar, un biselado, justo la marca que cabría esperar si el agujero hubiera sido efectuado por algo parecido a una bala moderna. ¿Disparos en la prehistoria?
Jack Cuozzo opina que el cráneo de Broken Hill no sería tan antiguo como los paleontólogos suponen y, desde luego, mucho menos que los que el estrato en que se halló evidenciaría. Y llega a esa conclusión no tanto por la anormalidad de los agujeros hallados en el cráneo sino porque una antigüedad como la que postulan los científicos estaría reñida con las teorías creacionistas que el Dr. Cuozzo defiende.
Los científicos no son de la misma opinión. Para la arqueología oficial la antigüedad del cráneo de Broken Hill está fuera de toda duda. En su día, los científicos estimaron su antigüedad en alrededor de 10.000 años. Sin embargo, posteriormente y gracias a técnicas de datación modernas, se ha establecido la antigüedad de los restos en 125.000 años y los clasificaron como una subespecie de neanderthales.
Y no fue éste el único cráneo hallado. En 1953, en Saldanha Bay, Hopefield, Sudáfrica, se encontró un segundo cráneo de un humanoide del tipo Kabwe, es decir, como el hallado en Broken Hill, con primitivas herramientas y restos de animales. A ese cráneo se le dio una antigüedad de entre doscientos y cuatrocientos mil años. Este hallazgo demostraría que no estábamos ante el cráneo de un homo sapiens aquejado de acromegalia, sino ante una subespecie de homínido que vivió en aquella zona de África.
Así pues, los últimos descubrimientos echarían por tierra los cálculos del Dr. Cuozzo en lo que hace referencia a la antigüedad del primer cráneo, pero, desde luego, no explicarían los agujeros hallados en el cráneo de Broken Hill, su morfología y su impecable trayectoria. Bien al contrario, la mayor antigüedad de los restos encontrados en Sudáfrica no hace sino añadir más oscuridad en este misterio. En definitiva, estamos ante un cráneo que tiene no menos de 125.000 años de antigüedad y con una anomalía que nadie puede aclarar de forma satisfactoria.
Y cuando a la ciencia se le pregunta qué explicación tendrían las perforaciones halladas en el cráneo de Broken Hill, ésta calla. La ciencia, simplemente, no sabe dar una explicación a este enigma.

El bisonte de Yakuzia

En efecto, en el Museo de Paleontología de Moscú (adscrito al Paleontological Institute of Russian Academy of Sciencies 117868- Moscow, Profsoyuznaya st., 123) puede contemplarse el esqueleto de un bisonte que en su cráneo presenta un agujero perfectamente redondo y que tuvo que ser causado por el impacto de un proyectil lanzado a gran velocidad. En otras palabras, su aspecto es sospechosamente parecido al que dejaría una bala de moderno calibre. Sólo que este animal originario de Yakuzia, en la Siberia oriental, vivió en aquellas latitudes hace entre 30.000 y 70.000 años, cuando el hombre no pasaba de ser (según la historia oficial) un mero neanderthal

Desde posturas academicistas se ha sugerido que tal impacto (cuya realidad es tan evidente que no puede ser negada) pudo deberse a causas naturales. Y se añade que el único fenómeno natural que pudo provocar algo así habría sido el impacto de un pequeño meteorito. Francamente, por muy expertos que sean los enunciadores de tan descabellada teoría, ésta me parece totalmente absurda ¿Se imaginan un meteorito, penetrando en la atmósfera terrestre e impactando justo en el centro del cráneo de un bisonte en plena estepa siberiana? ¿Qué posibilidades hay de que tal hecho ocurra realmente? Además, un meteorito de tales características debería haberse desintegrado por efecto del rozamiento con el aire, antes de golpear al animal.
Los estudiosos se han puesto de acuerdo en que fue precisamente este impacto lo que provocó con toda probabilidad la muerte del animal, sin embargo no coinciden en lo que pudo causarlo. De haberlo producido alguno de los utensilios que utilizaban los hombres de aquella época, el cráneo hubiera sido destrozado o, en todo caso, no hubiera podido producirse un agujero perfectamente regular y sin grietas a su alrededor. No es así, y lo cierto es que estamos ante un orificio efectuado limpiamente.
¿Quién se dedicaba a cazar con rifle hace diez mil años?

La esfera de sudafrica

El 2005 la nave espacial Cassini difunde una imagen de la luna de Saturno, Jápeto, la cual no es ninguna novedad pues en 1950 un señor llamado Chesley Bonestell plasma en una obra artística con detalle esta luna, destacando formaciones geométricas sólidas. Pero además, en 1993, en el libro Arqueología Prohibida, se informa que en 1982, en excavaciones de minas en Sudáfrica se encontraron cientos de esferas metálicas fabricadas, en su interior, serían fibrosas, recubiertas por metal que ni siquiera el hierro puede penetrar y tienen una antigüedad de DOS MIL OCHOCIENTOS MILLONES DE AÑOS… hay más. Resulta que esta esfera con tres surcos en el ecuador, tiene una similitud cuasi exacta con la imagen tomada por Cassini recién el 2005. Por cierto, Jápeto en la mitología griega es el padre de Prometo, el ‘Hacedor de la Humanidad’.”




La accion se situa en una mina de Ottosdal en sudafrica, en ese momento se encuentra una esfera en un sedimento de una antiguedad de 2800 millones de años, en ese momento se podria pensar que objetos con forma de esfera se dan mucho en la naturalesza, pero ya puedes dudar cuando el objeto en cuestion es metalico, y aun puedes llegar a dudar mas cuando este objeto en cuestión tiene tres surcos paralelos que se encuentran situados alrededor del ecuador de la esfera, que la verdad es que no parecen haber sido colocados ahi por la naturaleza, además se encuentra la particularidad que el sedimento donde fue encontrado constaba de un material blando y la esfera es de un material duro que no se raya con el acero, ademas se desecha la hipotesis de que algún minero haya tirado la esfera, ya que habia muchos testimonios aparte de que se han hecho muchos estudios cientificos aparte para rematar la faena todo el que quiera ver la esfera esta se encuentra en el museo de Klerksdorp (Sudáfrica).






Como puede ser que una construcción a todas luces artificial aparezca en un sedimento de 2800 millones de años cuando en esas fechas la tierra vivio en el periodo llamado el precambrico periodo en el que ya exisitian las bacterias pero la atmosfera no era igual que la actual estaba formada por hidrógeno, metano, vapor de agua y amoniaco, y solo despues hace 1800 millones de años la atmosfera paso a ser rica en oxigeno lo que provoco una masacre en las bacterias y seres unicelulares del planeta a la cual solo sobrevivio los mitocondrios que son la base de casi toda la vida actual.




¿despues de esto como puede alguien explicar esto?, y sobre todo ¿como alguien puede explicar esos curiosos surcos paralelos al ecuador?
Estó es lo que se llama un opar  objeto fuera de su tiempo, objetos datados en una epoca en la cual la historia oficial considera que los habitantes del planeta son incapaces de realizar semejante cosa, en este caso es que en el planeta no habia ni vida pluricelular y mucho menos mamiferos, ademas este opar es el considerado mas antiguo del mundo, objetos que no tienen explicacion ninguna y que son un quebradero de cabeza para todos.
Las esferas de Sudafrica

Monstruo del Lago Nes


El monstruo del lago Ness, familiarmente llamado Nessie, es el nombre de una criatura legendaria que se dice que habita en el lago Ness, un profundo lago de agua dulce cerca de la ciudad de Inverness. Junto con Big Foot y el Yeti, Nessie es quizá el "misterio" más difundido de la criptozoología.La mayoría de los científicos y otros expertos afirman que las pruebas que apoyan la existencia de Nessie no son convincentes, y consideran dichos informes fraudes o identificaciones erróneas de criaturas reales.
Historia de los avistamientos:
La más antigua referencia conocida sobre una misteriosa criatura presente en el río y lago Ness, sería el relato de la Vida de San Columba, donde se describe cómo en el año 565 San Columba habría salvado a alguien que supuestamente estaba siendo atacado por un monstruo en el lago Ness. Sin embargo, muchos críticos han cuestionado la credibilidad de esta historia, pues existe otra historia con características fantásticas, donde se dice que Columba habría matado a un hombre salvaje tan sólo con el poder de su propia voz. Igualmente algunas personas han asociado como primeras referencias, a antiguas leyendas locales sobre unos míticos caballos acuáticos llamados kelpies; que se dicen habitarían en las profundidades de este lago. En ambas referencias se destaca que a estas criaturas no se les atribuyen las mismas características anatómicas que actualmente son atribuidas al Monstruo del lago Ness.

La primera descripción moderna sucedió en 1868. Un artículo publicado ese año en el Inverness Courier, es el primero en referirse sobre rumores acerca de la existencia de un "pez enorme u otra criatura" en la profundidad de las aguas. Después de muchos años; en 1930, el periódico El Northern Chronicle, publicó una noticia titulada "Una extraña experiencia en el lago Ness" en la que se detalla la historia de dos pescadores que se refieren a un animal que produjo un gran remolino cerca de Tore Point.
En 1932, K. MacDonald afirmó que había visto a una criatura similar a un cocodrilo remontando el río Ness.
El artículo definitivo sobre la teoría del monstruo del lago Ness, fue el avistamiento que habría tenido lugar el 2 de mayo de 1933. El periódico Inverness Courier publicó la noticia de una pareja local que dijo haber visto "un enorme animal rodando y hundiéndose en la superficie". El informe del "monstruo" (título elegido por el editor del Courier) se convirtió en una sensación entre los medios. Las editoriales de Londres comenzaron a enviar reporteros a Escocia, e incluso un circo ofrecía una recompensa de 20.000 libras esterlinas por la captura del monstruo.
Más tarde ese mismo año, A.H. Palmer, quien atestiguó un avistamiento de Nessie el 11 de agosto de 1933, a las 07:00 AM, describió a la criatura como teniendo su cabeza —a la que consideró como estando de frente— al ras del agua. Su boca, que tenía una anchura de entre doce y dieciocho pulgadas (30 a 45 centímetros), se abría y cerraba; la abertura máxima de su boca era estimada en cerca de seis pulgadas (15 centímetros). Hasta este momento los periódicos hablaban simplemente de un pez misterioso o extraña criatura, y no se referían a la criatura como un ser prehistórico. Siendo descrito por primera vez como un monstruo prehistórico, por una pareja de turistas (los Spicer), poco después del estreno de la mundialmente famosa película King Kong, que en esos años sumergió al público en una auténtica "monstruomanía" a través de todo el mundo.
La preocupación moderna por la criatura, ya conocida como un monstruo prehistórico del Lago Ness, fue despertada por la fotografía presuntamente tomada por el cirujano R.K. Wilson el 19 de abril de 1934, que parecía mostrar a una enorme criatura de cuello largo que se deslizaba a través del agua. Décadas más tarde, el 12 de marzo de 1994, Marmaduke Wetherell afirmó haber falsificado la fotografía tras ser empleado por el periódico Daily Mail para encontrar a Nessie; indicando también que Wilson no habría tomado la foto, y que su nombre fue utilizado solamente para darle más credibilidad a la misma. Sin embargo y a pesar de la confesión, esta foto ya había sido difundida por todo el mundo como una "evidencia absoluta"; lo cual colocó definitivamente en la cultura popular, la leyenda del Monstruo del lago Ness de Escocia.
¿Plesiosaurio?

La mayoría de las descripciones modernas sobre el aspecto del monstruo, indican que existiría una criatura que se asemejaría a los extintos plesiosaurios, unas criaturas acuáticas prehistóricas. Así, la descripción moderna que se le da normalmente sería similar a la que presentan los fósiles de plesiosaurios pertenecientes a la era mesozoica; que indican que este animal prehistórico debió ser un animal físicamente enorme, con un cuello alargado, una cabeza pequeña y dos pares de aletas de propulsión bajo el agua. La debatida hipótesis de la conexión de plesiosaurio con el monstruo del Lago Ness, hizo que se convirtiera en un asunto popular en el inicio del campo de la criptozoología.Sin embargo, los científicos, e incluso actualmente también la gran mayoría de los criptozoólogos; sugieren que la hipótesis de que el monstruo del Lago Ness sea un remanente de la especie plesiosaurio, es algo que se presenta altamente inverosímil. Entre las razones dadas destacan:
Se necesitaría tener una colonia de crianza de tales criaturas para que pudiesen experimentar una supervivencia a largo plazo, y junto con el hecho de que los plesiosauros necesitaban emerger a la superficie para respirar, esto daría lugar a avistamientos más frecuentes de los que se han divulgado en la actualidad.
Muchos biólogos también señalan que el lago Ness no es lo bastante grande o productivo para tener una biomasa que pueda mantener incluso a una familia pequeña de estas criaturas.Por otra parte, el lago fue originado como el resultado de una glaciación geológica reciente y estuvo en estado sólido y congelado durante la era del hieloA pesar de todo lo anterior, muchos criptozoólogos argumentan que el Lago Ness es un lago con salida al mar durante cierta época del año y que quizás la criatura no sea nativa del lago mismo.

¿Nes... que?

Por otra parte, otros avistamientos no concuerdan con la descripción del plesiosauro o incluso con ninguna otra criatura acuática: en abril de 1923, Alfred Cruickshank afirmó haber visto una criatura de 3 a 3,5 m de largo con un lomo arqueado, similar a un elefante, que cruzaba la carretera frente a él mientras conducía su coche. Otros avistamientos reportan criaturas más similares a los camellos o caballos. Ha habido avistamientos del monstruo del Lago Ness en tierra de los cuales fueron en los años 1918, 1933 (este es el mas famoso) y 1964 agregando tambien la de Cruickshank en 1923.Se llama el monstruo Nessie y la historia lo adjudicaEsta teoría sobre la naturaleza exacta de los avistamientos de Nessie es variada: se le atribuye a la pareidolia, a la identificación errónea de focas o leones marinos, peces, troncos, o grupos de animales formando filas, o al producto de un espejismos o distorsiones de luz, a efectos en el agua como olas u ondulaciones provocadas por embarcaciones. Esta teoría obtiene más fuerza, ya que la mayoría de los relatos y todas las fotografías que son dudosas y no se han podido descartar como falsificaciones, muestran o indican a la criatura desde una gran distancia; lo cual puede alterar la real interpretación de la figura. Entre las posibles causas de equivocadas interpretaciones, destacan:

La presencia de un enorme esturión, el cual fue encontrado en las corrientes marinas cercanas al lago Ness. Debido al tamaño del esturión y su apariencia inusual; estos animales pueden ser fácilmente confundidos como un monstruo por alguna persona no familiarizada con estos animales.
Una teoría reciente que postula que el "monstruo" es realmente nada más que el efecto de burbujas causada por actividad volcánica en el fondo del lago. Este argumento posterior está basado en menor grado con una correlación entre el movimiento tectónico y los avistamientos reportados.
Un científico escocés lanzó la más reciente teoría sobre la posible existencia del "monstruo del lago Ness". Sostiene que las vistas que se fotografiaron en más de una oportunidad, pudieron haber sido elefantes de circo que visitaban la zona de Inverness en los años 30. Visto según el dibujo que acompañó a la presentación de sus resultados, la trompa y la joroba del elefante corresponderían a esas imágenes del pasado que dieron vida a la leyenda del monstruo.
Sin embargo, como cualquier mito contemporáneo o antiguo, la existencia de Nessie se contrapone con la simple lógica. Para que pueda sobrevivir una especie en un ambiente de dimensiones finitas como un lago, se necesita un número mínimo de individuos para reproducirse y mantener la especie. En el lago Ness, no hay suficiente alimento para mantener los 10 o 15 animales de esas dimensiones necesarios. Más aún, como todo animal, los "Nessies" deben crecer y morir. Sin importar su número, los cadáveres deben aparecer tarde o temprano en la orilla, aunque sea un solo hueso. Recordemos que algunos dinosaurios han sido identificados sólo por un fragmento óseo pequeño. Ningún resto orgánico ha aparecido, nada que arroje un ADN desconocido. Recordemos que criaturas en ambientes aún más remotos que un lago (como el fondo oceánico) han dado pruebas de su existencia mediante sus restos, conocido es el caso del calamar gigante. Como dijo un sabio: "la verdad se defiende sola" y Nessie nunca ha defendido su existencia en forma innegable.

Presuntas pruebas.

Algunos argumentan que la historia de los avistamientos del "monstruo" en el lago son evidencia circunstancial que afirma la existencia de esta criatura, incluso muchos han señalado que existen pruebas que apoyan la existencia del Monstruo del lago Ness; sin embargo con el paso del tiempo estas pruebas han sido descartadas. Ejemplo de ello ha sido:

 La fotografía obtenida por Wetherell.

La afamada fotografía de esta criatura obtenida por Wetherell y que durante mucho tiempo se consideró como la prueba del Monstruo del lago Ness; fue confirmada como un engaño por las confesiones de Chris Spurling, yerno de Marmaduke Wetherell, en su lecho de muerte. Spurling afirmó que dicha fotografía, la cual inspiró un gran interés popular por el monstruo, era en realidad un montaje de arcilla pegada a un submarino de juguete. Wetherell, uno de los grandes cazadores, había sido convencido falsamente para buscar a un monstruo imaginario en los alrededores que resultó ser una broma de niños, lo que provocó que fuese ridiculizado públicamente por “Daily Mail”, el diario que lo empleó. Por consiguiente, Marmaduke Wetherell realizó una broma para tomar venganza, y trabajó en ésta con Chris Spurling (su yerno según lo mencionado) quien era un especialista en la escultura, Ian Marmaduke (su hijo) quien compró el material para el Nessie falso, Maurice Chambers (un agente de seguros) quien llamaría a Robert Wilson (un cirujano) para que publicara las fotografías.
Mucho antes de las afirmaciones de Spurling, otros ya habían declarado verdaderas las fotografías, y habían sugerido que la fotografía podría corresponder a un plesiosaurio o alguna especie de dinosaurio acuático. Sin embargo, a pesar de las confesiones de Chris Spurling, algunas personas todavía creen que las fotografías son reales, argumentando el hecho de mostrarse dos fotografías que representan dos poses ligeramente diferentes. Los defensores, entre ellos personas dedicadas al análisis de fotografías, indican que este hecho es válido para decir que Nessie existe y que puede ser que exista más de un plesiosaurio.



 La fotografía obtenida por Robert Rines.

A principio de 1970, un grupo encabezado por el abogado estadounidense Robert Rines obtuvo algunas fotografías subacuáticas. Una de ellas era una vaga imagen, quizás de una aleta romboidal (otros han argumentado que el objeto podría ser un grupo de burbujas de aire o una aleta de algún pez). Con base en esta fotografía, Sir Peter Scott, uno de los naturalistas más conocidos de Gran Bretaña, anunció en 1975 que el nombre científico del monstruo sería en adelante Nessiteras rhombopteryx (del griego "Monstruo de Ness con aleta de forma diamantada").
Esto permitiría que Nessie fuese agregado a un registro británico de la "fauna oficialmente protegida" (pero comparando . Se puede notar por los periódicos de Londres, que con el nombre Nessiteras rhombopteryx se puede crear un anagrama de "monster hoax by Sir Peter S" (monstruo de broma de sir Peter S.).
Las famosas fotografías subacuáticas fueron obtenidas examinando cuidadosamente las profundidades del lago con el radar, sobre el curso de varios días, en búsqueda de actividad subacuática inusual. Una cámara fotográfica subacuática con una luz de alta potencia colocada, (necesaria para penetrar la famosa oscuridad del lago Ness) fue montada para registrar imágenes debajo de la superficie. Varias de las fotografías resultantes, a pesar de su calidad obviamente pésima, parecen de hecho demostrar —mediante un leve uso de la imaginación— la existencia de un animal que se asemejaría a un plesiosaurio en varias posiciones. También se obtuvieron algunos acercamientos de lo que se sugiere que es la aleta en forma de diamante, en diferentes posiciones, lo que indicaría movimiento. Sin embargo, la comunidad científica e incluso muchos criptozoólogos han descartado estas pruebas, ya que se conoce que todas estas fotografías fueron modificadas por computador, y no corresponden a las originales. Ejemplo de ello se presentaría en la fotografía que se conoce popularmente como la imagen de una aleta. En esta fotografía la imagen está girada en comparación con la original, y además fue obtenida mediante retoques que se hicieron por ordenador para sugerir la forma deseada. La fotografía original, al ser observada, sólo muestra lo que parecen ser sedimentos del fondo del lago.Sin embargo todo esto llevo a casi un millón de reporteros de todo el mundo a ir en busca de pruebas que hicieran creadibilidad a las personas.
Nessi